sábado, 21 de febrero de 2009




Un sobrevalorado secreto
Candela Armas Acosta


Crear grandes expectativas lleva muchas veces a la desilusión. The Reader (2008) se presenta con un buen argumento. Un adolescente alemán, Michael, mantiene una aventura en la posguerra con una mujer que le dobla la edad, Hanna y en cada uno de sus encuentros ella le pide que le lea un libro. Por extrañas circunstancias el romance acaba, pero ocho años después se reencuentran en un juicio en el que se la está procesando por su colaboración con el régimen nazi. Entonces el joven comprende porque le pedía que le leyese y de la ruptura: es una mujer analfabeta. A partir de aquí el director plantea un frio y distante debate moral que desencadena una serie de actitudes por ambas partes que no responden a ningún planteamiento previo. Es una reflexión sin emoción y nunca se termina de entender. Lo peor es el final pues se nos presentan los personajes edulcorados y el espectador los termina redimiendo de sus culpas.

Hay numerosas lagunas como el hecho de que está narrada a partir de un flashback injustificado y en la evolución de los personajes hay comportamientos que no parecen coherentes. Para añadir más confusión en los últimos diez minutos cobran importancia otros personajes que han sido irrelevantes hasta el momento y que por tanto no aportan nada a la historia.

Se ha sobrevalorado la película y ésta ni siquiera tiene un mensaje claro. Puede que se trate simplemente de un drama comercial que ha sabido aprovecharse de un buen argumento. El espectador no sabe al salir del cine si se ha enfrentado a una película de amor, a una reflexión sobre la culpa y el perdón o tan sólo a una película sobre los recuerdos que marcan la vida de las personas.
Sin embargo, no todo es negativo. La confusión que producen tantas líneas narrativas no oculta la interpretación de Kate Winslet. Como protagonista, la actriz británica eclipsa al resto de actores y es imposible no mirarla solo a ella en cualquiera de las escenas. Su actuación es clave en los 123 minutos, pero no es suficiente para salvar un film, injustamente alabado como una de las mejores películas del año, que tristemente deja mucho que desear.

No hay comentarios:

Publicar un comentario